Toyota presenta la alternativa al coche eléctrico: el motor de *combustión* de hidrógeno

Desde los albores de los primeros coches eléctricos siempre se ha buscado encontrarle trabas, problemas y sustitutos, ya que, aunque generan menos emisiones para la capa de ozono han aparecido otros problemas, como la falta de litio para las baterías, la autonomía de algunos modelos o el alto precio que hay que pagar por un automóvil de estas características.

Y como los obstáculos cada vez van in crescendo, las empresas se afanan en darle la vuelta a la tortilla y buscar diferentes opciones. Es el caso de Toyota, que ha pensado en fabricar un motor de combustión de hidrógeno. Aunque en su portfolio ya aparecen automóviles con pilas de este elemento químico, se pretende algo más específico. 

“El presidente de la compañía, Akio Toyoda, ha argumentado durante mucho tiempo que el problema con los motores de combustión no es la combustión en sí, sino más bien el subproducto de carbono de la quema de combustibles fósiles. Es por eso que el hidrógeno, que emite una cantidad casi insignificante de carbono, es la solución perfecta a los ojos de Toyota”, recogen desde The Drive. 

El Yaris GR ya equipa estas características. Es por ello que varios fabricantes de la industria quieren unirse a este cambio. Lo que ahora es una incógnita es cómo encajará esta media dentro del mercado actual y serán de aceptación. 

Cómo funciona un motor de hidrógeno

Un motor de hidrógeno se pone en marcha por la reacción de hidrógeno y oxígeno en su grupo de pila combustible. Ahí es donde se genera la electricidad que mueve el motor eléctrico que hace que el vehículo pueda moverse. 

Este elemento en cuestión se guarda en unos depósitos especiales de alta presión y seguidamente se desplaza hacia esa pila mencionada donde se da la mano con el oxígeno para poder dar a luz a la electricidad. 

Dependiendo de la electricidad requerida por el vehículo, la batería en la que se almacena nos da más o menos. Hay que tener en cuenta además que esta batería también puede guardar en su haber energía procedente de la frenada regenerativa.

Las emisiones que desprende un vehículo con estas características son cero. No produce elementos contaminantes para el planeta. 

El hidrógeno es muy abundante y es muy sencillo de conseguir, pero aquí uno de los problemas está en que no todos los fabricantes poseen ahora mismo los medios para convertir este compuesto en H2 puro (se hace a través de un proceso llamado electrólisis, que descompone el agua mediante electricidad). 

Vía | Toyota presenta la alternativa al coche eléctrico: el motor de *combustión* de hidrógeno | TopGear.es